La Presencia del Espíritu en nosotros es el mayor TESTIMONIO de la "Vida de Dios" en nosotros.
De que no somos huérfanos.
De que tenemos hogar - de que hay algo en nosotros más definitivo- donde podemos experimentar estar a salvo de nuestros propios juicios y de las presiones que nos imponen.
Su PRESENCIA es LIBERTAD en nosotros... desafiándonos a salir de donde estamos... nos pone en movimiento... nos empuja.
NOS EMPUJA DE LA DUDA A LA CONFIANZA.
DE LA IMPACIENCIA AL TIEMPO HABITADO.
NOS EMPUJA DEL DESALIENTO AL CORAZÓN DESPIERTO A SU MAYOR VERDAD.
Todos tenemos experiencia de que el Evangelio es camino... es Promesa... y que nos invita siempre a estar en búsqueda sin dar certezas… haciéndonos conscientes de que nuestra fragilidad no nos abandona.
Por eso "el ESPÍRITU viene en ayuda de nuestra fragilidad" para hacernos experimentar esa CONFIANZA que no podemos darnos a nosotros mismos... pero que sí podemos caminar hacia ella.
Caminar hacia la confianza comienza por soltar todas esas opiniones de nosotros mismos y esa cantidad de comparaciones con las que vivimos.
Comienza por atrevernos a poner entre paréntesis lo aprendido de como tienen que ser las cosas… o por dónde tienen que ir.
CAMINAR HACIA LA CONFIANZA EXIGIRÁ DE LA ESCUCHA ATENTA A LA VIDA... TAL COMO APARECE... NO PARA CAMBIAR NADA.…
Escuchar se convertirá en una profunda valoración de sí mismo… de querer aprender… supondrá desinterés de nuestra parte… porque "nada se da ya y ahora"... descubriendo una vez más que el tiempo es nuestro compañero de viaje para crecer.
La ESCUCHA de nosotros mismos – de nuestros propios ritmos - es la que nos salvará del DESALIENTO que llega cuando experimentamos que no llegamos… o que “otra vez estamos con lo mismo” (expresión terrible y nefasta).
Y nos abrirá a lo que tiene la vida de POSIBILIDAD y NOVEDAD... aunque venga bajo la misma apariencia.
Pero como estar abiertos a la NOVEDAD si queremos sentirnos seguros todo el tiempo… si creyendo saberlo todo queremos tenerlo todo ordenado... todo bajo nuestro control.
Como estar abiertos a la NOVEDAD si andamos con tanto MIEDO.
El miedo ha sido utilizado (y lo es todavía) dentro del cristianismo como arma – como estrategia para despertar la atención. Ha causado y causa mucho mal – de ahí que percibimos muchas cosas en nosotros como amenazas – como si por el hecho de pensar esto… o sentir aquello… o hacer tal otra... se nos quitará algo que Dios nos regaló "sin condiciones".
LA PRESENCIA DEL ESPÍRITU ES TESTIMONIO DE QUE NO HAY SITUACIÓN QUE DIOS NO ABRACE, NO ACOMPAÑE Y NO AME.
Y nos hace comprender que "sabernos en sus manos" - "seguir a Jesús" - "experimentar-nos amados" es ALGO MUY FRÁGIL.
No se apoya en lo que sentimos hoy... o en lo que sabemos... o en lo que percibimos de nosotros mismos... Además de que se "CAMINA A TIENTAS", se apoya en la CONFIANZA.
NECESITAMOS RECOBRAR LA CONFIANZA.
HACIA ALLÍ NOS EMPUJA EL ESPÍRITU.
Caminar hacia la confianza es caminar hacia nuestro propio corazón.
Caminar hacia la confianza es saber que nuestro corazón no se adhiere fácilmente al Evangelio.
Caminar hacia la confianza es creer que la transformación requiere infinita paciencia – y que podemos en todo momento acoger el Perdón.
SE HAN PREGUNTADO ALGUNA VEZ,
SI LA CONFIANZA DEL CORAZÓN ESTUVIERA AL PRINCIPIO DE TODO, ¿QUE SERÍA DIFERENTE?...
Si estuviese en la base de nuestras maneras de encarar las cosas?
Si estuviese ahí cuando algo nos sale mal… cuando tropezamos?
Cuando experimentamos el límite?
Cuando sentimos las resistencias a ponernos en camino?
Cuando somos rechazados o nos dicen una palabra que no nos gusta?
Cuando nos corrigen?
Si nuestra confianza depende de la presencia de ciertos apoyos… ¿Qué pasará cuando no estén?
NADIE PUEDE CONSTRUIRSE DESDE LA DUDA Y LA SOSPECHA.…
DE QUE SI MAÑANA NO HACEMOS ALGO O ALGO NOS SALE MAL ...
NOS DEJARÁN DE QUERER…
El Espíritu en nosotros - verdadero HOGAR de nuestras vidas - nos dice que SOMOS HIJOS... QUE HABITAN EN NOSOTROS SIN CONDICIONES.
Podemos entonces experimentar PAZ... porque allí nadie nos exige ni nos esclaviza.
PAZ QUE SURGE DE UN CORAZÓN DESPIERTO -NO DORMIDO- A QUIEN REALMENTE LO HABITA.
PAZ que surge de saber que nuestra VERDADERA IDENTIDAD no depende de hacer bien todas las cosas.
Esto no significa ausencia de tironeos...lucha o dolor... más aún caminar hacia esta confianza supondrá ser despojados... porque para "estar en camino" no podemos llevar mucho equipaje.
Hermanos y hermanas...
Hoy frente a nuestras vidas como ayer en Betania -frente a la tumba de Lázaro - el Espíritu de Jesús vuelve a gritar "quiten la piedra..."
Quiten lo que impide que el “aliento de Dios” penetre en cuanto hay de cerrado en nosotros... o en nuestras comunidades... o en nuestras familias.
Con su "confianza en nosotros" vayamos entonces al encuentro de esa Fuente que nos habita... animemos-nos a atravesar todos esos lugares que nos mantienen alejados de nosotros mismos -y por ende de los demás - y que no nos permiten disfrutar de la vida que surge de esa "agua nueva".
ABRIR LO CERRADO...
PORQUE ALLÍ HAY RIQUEZA POR DESCUBRIR.
El Espíritu que es VIENTO Y FUEGO "viene en ayuda de nuestra debilidad..." Iluminando nuestra consciencia - abriéndonos a la presencia de los otros - desatando los nudos de nuestra historia - soltándonos de los afectos enfermizos - abrazando con nosotros el dolor y la muerte - comunicándonos vida - haciéndonos recordar que el Perdón que nos habita sostiene la confianza.
PODEMOS ENTONCES DEJAR DE DEFENDERNOS... no hay necesidad de negar nada (aun lo que huele mal)... comprendiendo que nuestra desconfianza brota de nuestras heridas.
Abramos el Libro de nuestra Historia Personal
con sus recuerdos y sus ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
Abramos el Libro de nuestra Historia Familiar
con sus recuerdos y sus ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
Abramos el Libro de nuestra Historia Comunitaria
con sus recuerdos y ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
Confiados en palabras que le dijo al Anciano Nicodemo:
-"El viento sopla... no sabes de donde viene ni adónde va... lo mismo sucede con todo el que ha nacido del Espíritu."
Y nos abrirá a lo que tiene la vida de POSIBILIDAD y NOVEDAD... aunque venga bajo la misma apariencia.
Pero como estar abiertos a la NOVEDAD si queremos sentirnos seguros todo el tiempo… si creyendo saberlo todo queremos tenerlo todo ordenado... todo bajo nuestro control.
Como estar abiertos a la NOVEDAD si andamos con tanto MIEDO.
El miedo ha sido utilizado (y lo es todavía) dentro del cristianismo como arma – como estrategia para despertar la atención. Ha causado y causa mucho mal – de ahí que percibimos muchas cosas en nosotros como amenazas – como si por el hecho de pensar esto… o sentir aquello… o hacer tal otra... se nos quitará algo que Dios nos regaló "sin condiciones".
LA PRESENCIA DEL ESPÍRITU ES TESTIMONIO DE QUE NO HAY SITUACIÓN QUE DIOS NO ABRACE, NO ACOMPAÑE Y NO AME.
Y nos hace comprender que "sabernos en sus manos" - "seguir a Jesús" - "experimentar-nos amados" es ALGO MUY FRÁGIL.
No se apoya en lo que sentimos hoy... o en lo que sabemos... o en lo que percibimos de nosotros mismos... Además de que se "CAMINA A TIENTAS", se apoya en la CONFIANZA.
NECESITAMOS RECOBRAR LA CONFIANZA.
HACIA ALLÍ NOS EMPUJA EL ESPÍRITU.
Caminar hacia la confianza es caminar hacia nuestro propio corazón.
Caminar hacia la confianza es saber que nuestro corazón no se adhiere fácilmente al Evangelio.
Caminar hacia la confianza es creer que la transformación requiere infinita paciencia – y que podemos en todo momento acoger el Perdón.
SE HAN PREGUNTADO ALGUNA VEZ,
SI LA CONFIANZA DEL CORAZÓN ESTUVIERA AL PRINCIPIO DE TODO, ¿QUE SERÍA DIFERENTE?...
Si estuviese en la base de nuestras maneras de encarar las cosas?
Si estuviese ahí cuando algo nos sale mal… cuando tropezamos?
Cuando experimentamos el límite?
Cuando sentimos las resistencias a ponernos en camino?
Cuando somos rechazados o nos dicen una palabra que no nos gusta?
Cuando nos corrigen?
Si nuestra confianza depende de la presencia de ciertos apoyos… ¿Qué pasará cuando no estén?
NADIE PUEDE CONSTRUIRSE DESDE LA DUDA Y LA SOSPECHA.…
DE QUE SI MAÑANA NO HACEMOS ALGO O ALGO NOS SALE MAL ...
NOS DEJARÁN DE QUERER…

Podemos entonces experimentar PAZ... porque allí nadie nos exige ni nos esclaviza.
PAZ QUE SURGE DE UN CORAZÓN DESPIERTO -NO DORMIDO- A QUIEN REALMENTE LO HABITA.
PAZ que surge de saber que nuestra VERDADERA IDENTIDAD no depende de hacer bien todas las cosas.
Esto no significa ausencia de tironeos...lucha o dolor... más aún caminar hacia esta confianza supondrá ser despojados... porque para "estar en camino" no podemos llevar mucho equipaje.
Hermanos y hermanas...
Hoy frente a nuestras vidas como ayer en Betania -frente a la tumba de Lázaro - el Espíritu de Jesús vuelve a gritar "quiten la piedra..."
Quiten lo que impide que el “aliento de Dios” penetre en cuanto hay de cerrado en nosotros... o en nuestras comunidades... o en nuestras familias.
Con su "confianza en nosotros" vayamos entonces al encuentro de esa Fuente que nos habita... animemos-nos a atravesar todos esos lugares que nos mantienen alejados de nosotros mismos -y por ende de los demás - y que no nos permiten disfrutar de la vida que surge de esa "agua nueva".
ABRIR LO CERRADO...
PORQUE ALLÍ HAY RIQUEZA POR DESCUBRIR.
El Espíritu que es VIENTO Y FUEGO "viene en ayuda de nuestra debilidad..." Iluminando nuestra consciencia - abriéndonos a la presencia de los otros - desatando los nudos de nuestra historia - soltándonos de los afectos enfermizos - abrazando con nosotros el dolor y la muerte - comunicándonos vida - haciéndonos recordar que el Perdón que nos habita sostiene la confianza.
PODEMOS ENTONCES DEJAR DE DEFENDERNOS... no hay necesidad de negar nada (aun lo que huele mal)... comprendiendo que nuestra desconfianza brota de nuestras heridas.
Abramos el Libro de nuestra Historia Personal
con sus recuerdos y sus ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
Abramos el Libro de nuestra Historia Familiar
con sus recuerdos y sus ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
Abramos el Libro de nuestra Historia Comunitaria
con sus recuerdos y ausencias a la FUERZA de este Viento y Fuego.
-"El viento sopla... no sabes de donde viene ni adónde va... lo mismo sucede con todo el que ha nacido del Espíritu."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario